
La cultura es un sistema integrado de valores y comportamientos que diferencia una organización de otra. La cultura es aprendida y por lo tanto un medio que permite moldear las conductas de los trabajadores hacia la consecución de objetivos comunes.
Una cultura organizacional fuerte es aquella en la que sus trabajadores tienen mapas cognitivos compartidos. Es decir, comparten los valores nucleares con intensidad y comprenden las acciones deseadas en el marco de una estrategia organizacional.
Existe la falsa creencia de que los cambios culturales toman años. Sin embargo, no es el tiempo, sino lo que pasa en el tiempo lo que acelera o no el cambio cultural.

✅ Puedo también acompañar a su organización en la actualización de valores y afinamiento de comportamientos más alineados con la estrategia organizacional.
✅ Si el foco de la intervención es una cultura organizacional orientada al conocimiento y el aprendizaje, cuento con un instrumento de evaluación, que operacionaliza la ISO 30401, para identificar el estado actual y a partir de ellos generar acciones para el logro de la cultura deseada basada en conocimiento.

De acuerdo con Nonaka y Takeuchi, existen dos tipos de conocimiento: el tácito y el explícito. El tácito es ese conocimiento que tienen los expertos, difícil de expresar en palabras, que explica su alto desempeño en un cargo o rol. El conocimiento tácito se refiere a las habilidades y experticia que tiene un trabajador que explican su alto desempeño.
La dificultad que existe con el conocimiento tácito es que es difícil de expresar oralmente, porque el trabajador no tiene claridad de qué exactamente es lo que hace bien para lograr su buen desempeño. El conocimiento tácito es adquirido mediante la experiencia, y es difícil de identificar, comunicar y documentar, por lo tanto, requiere ser gestionado.
El conocimiento explícito es todo conocimiento que ya está documentado, por ejemplo, en manuales, procesos, procedimientos, fórmulas y protocolos. El que esté escrito no garantiza que muestre su nivel excepcional, de allí que frecuentemente deba ser actualizado. A este proceso Nonaka y Takeuchi lo llaman combinación.
A. La primera es que contribuye a que los trabajadores que se jubilarán pronto documenten su conocimiento clave y/o transfieran el conocimiento experto a los trabajadores que asumirán sus cargos o roles, de tal manera que este conocimiento no se pierda.
B. La segunda es que facilita el proceso de formación de las personas que están en proceso de inducción o de desarrollo de carrera, brindando una metodología más ágil de transferencia de conocimiento.
C. La tercera es que facilita el proceso de transferencia de conocimiento de trabajadores expertos a no expertos (socialización) en el día a día de la entidad, lo cual contribuye a acelerar la curva de aprendizaje de trabajadores en su cargo y puesto de trabajo.

Como consultor formador e investigador, a través de los años he desarrollado una metodología para la identificación, captura y documentación del conocimiento tácito de los trabajadores.
✅ Puedo también acompañar a su organización en una experiencia piloto con conocimiento tácito de valor organizacional para que aprendan la metodología y la apliquen a otros contextos.
¡Si cree que es el momento para que su organización no pierda más conocimiento tácito escríbame y hablamos!

Existen varios tipos de comunidad de práctica. La más frecuente es la de personas de una organización que se reúnen para estudiar un tema de interés institucional. La segunda, es un grupo de personas con un perfil particular que se reúnen para proponer y desarrollar un entregable, que de manera innovadora contribuya al logro de un objetivo organizacional. Dependiendo de la naturaleza de la entidad, el entregable puede ser un producto o servicio, nuevo o mejorado.
A partir de múltiples años de investigación, formación y experiencia, he desarrollado una Metodología de Gestión del Conocimiento e Innovación, la cual permite que comunidades de práctica, basadas en un objetivo organizacional, propongan y desarrollen un entregable de valor, que de manera innovadora contribuya a la gestión institucional.
La metodología integra una herramienta común en oriente, que es el pensamiento intuitivo. La técnica utilizada es una operacionalización de lo que es llamado en innovación “salirse de la caja”.
Los pasos de la metodología son: forme o fortalezca una comunidad de práctica orientada al desarrollo de entregables, identifique un objetivo organizacional, genere conocimiento clave que contribuya al objetivo, lluvia de ideas racional, lluvia de ideas intuitiva, traducción de la idea intuitiva, propuesta de entregable que: contribuya al logro del objetivo organizacional y de manera innovadora.

✅ Puedo también acompañar a su organización en una experiencia en donde acompaño a la organización desde el momento de formación de la comunidad de práctica, hasta llevarla al desarrollo del entregable de valor organizacional.
¡Si cree que es el momento para que su organización fortalezca su capacidad innovadora basada en comunidades de práctica escríbame y hablamos.!